Receta de croquetas de atún

Receta de croquetas de atún

Si has pensado que preparar unas croquetas de atún caseras es más sencillo de lo que parece, he de decirte que estás en lo cierto. Además, te van a salir tan ricas que seguro que no vas a tardar en repetir.

Sí, es cierto que se tarda en hacer las croquetas porque hay que esperar a que se enfríe la masa, pero la espera merece la pena. Adecuadas para cualquier época del año, tanto para la comida como para la cena, alégrate el día acompañando una sopita de fideos de entrante, si estás en invierno, o una ensalada de pasta para el verano.

¿Tienes ya todos los ingredientes listos para hacer tus croquetas de atún? Aquí te contamos todos los detalles al estilo elcroquetario.com. ¡A croquetear!

Ingredientes

  • 100 g. de atún en aceite (peso escurrido)
  • 30 g. de aceite de oliva virgen extra (vale el del atún)
  • 1 cebolla, pelada y picada muy fino
  • 30 g. de mantequilla
  • 60 g. de harina de trigo
  • 500 ml de leche entera
  • 1 pizca de nuez moscada
  • 1 pizca de pimienta negra
  • 2 huevos
  • Pan rallado
  • Sal
  • Aceite para freír

Preparación de las croquetas de atún

  1. Comenzamos la elaboración de estas croquetas de atún preparando un sofrito de cebolla. Para ello, vamos a pelar y cortar la cebolla muy fino. En una olla, ponemos a calentar el aceite de oliva y la mantequilla y cuando se derrita, echamos la cebolla y la rehogamos hasta que se vuelva transparente.
  2. Desmigamos el atún y lo echamos a la sartén. Mezclamos bien y espolvoreamos el ahora que dejamos que se haga un par de minutos para que pierda el sabor a crudo.
  3. A continuación, añadimos la leche y removemos enérgicamente con unas varillas para que no salgan grumos. Dejamos que cueza sin dejar de remover hasta que se despegue de las paredes de la olla.
  4. Sazonamos con sal, pimienta y nuez moscada al gusto. Probamos para verificar la cantidad de condimentos y si fuera necesario rectificamos.
  5. Transferimos la masa a una fuente y untamos con una capa fina de aceite la superficie. Guardamos tapado en la nevera al menos 4 horas o de un día para otro.
  6. Sacamos la masa de la nevera y la dividimos en porciones iguales. Le damos forma de croqueta a cada porción.
  7. Pasamos cada croqueta primero por huevo y luego por el pan rallado. Vamos vigilando que se cubra bien por todos lados para que la bechamel no se escape durante la fritura.
  8. Ponemos a calentar el aceite. La cantidad debe ser suficiente para cubrir las croquetas. Con esto, obtendremos una fritura perfecta.
  9. Una vez caliente, pero sin que llegue a humear, vamos friendo las croquetas por tandas hasta que estén doradas.
  10. Dejar reposar las croquetas sobre papel absorbente o una rejilla mientras terminamos de freír. ¡A disfrutar!

Receta de croquetas de espinacas

Receta de croquetas de espinacas

Aunque quizás de primeras puedas pensar que unas croquetas de espinacas son poco apetecibles por ser verdes, te sorprenderá descubrir que son un bocado delicioso. Las espinacas combinan genial con la bechamel, no te digo más.

A la hora de degustarlas, las puedes servir como aperitivo o como plato, para esto último, sólo necesitas acompañarlas de una ensalada mixta con atún, que le vendrá de maravilla. Pero si buscas algo más suculento, tienes que probarlas con un poco de tomate frito casero. ¡Ya verás qué combinación!

Dicho esto, aquí tienes cómo hacer croquetas de espinacas según te lo contamos en elcroquetario.es. ¡A croquetear!

Ingredientes

  • 200 g. de espinacas frescas
    • (100 g si son congeladas )
  • 60 g. de harina de trigo
  • 30 g. de mantequilla
  • 30 g. de aceite de oliva virgen extra (2 cucharadas)
  • 500 ml de leche entera
  • 1 cebolla
  • 1 pizca de nuez moscada
  • 1 pizca de pimienta negra
  • 2 huevos
  • Pan rallado
  • Sal
  • Aceite para freír

Preparación de croquetas de espinacas

  1. Lo primero de todo vamos a comenzar limpiando las espinacas si las utilizamos frescas. Las enjuagamos en agua y las escurrimos. Luego, las vamos a cortar en trocitos, tanto las hojas como los tallos.

  2. Pelamos la cebolla y la picamos muy finamente.

  3. Ponemos una olla al fuego medio. Calentamos en ella el aceite de oliva junto con la mantequilla hasta que ésta última se derrita. Echamos la cebolla y la sofreímos hasta que se ponga translúcida. Removemos con frecuencia para que no se queme.

  4. Echamos ahora las espinacas a la olla. Removemos y las rehogamos unos 5 minutos a fuego medio.

  5. Espolvoreamos la harina, mezclamos bien y dejamos que cueza un par de minutos para que pierda el sabor a crudo.

  6. Incorporar la leche poco a poco al mismo tiempo que removemos con unas varillas. Probamos y sazonamos al gusto con sal, pimienta y nuez moscada.

  7. Calentamos a fuego medio removiendo con frecuencia hasta que la bechamel empiece a despegarse de la olla.

  8. Engrasamos con mantequilla una fuente. Untamos con una fina capa de aceite la superficie para que no se reseque, tapamos y lo guardamos en la nevera para que se enfríe y endurezca la masa. Lo dejamos allí al menos 4 horas o de un día para otro.

  9. Sacamos la masa de la nevera y la moldeamos en forma de croqueta. Pasamos por huevo batido y rebozamos con pan rallado.

  10. Freír las croquetas de espinacas en abundante aceite bien caliente (pero sin que llegue a humear). Hay que freírlas por tandas, sin sobrecargar la fritura. Lo mejor es que el aceite cubra por completo las croquetas.

  11. Una vez doradas al gusto, las sacamos sobre papel absorbente o una rejilla. ¡Que las disfrutes!

Receta de croquetas de bacalao

Receta de croquetas de bacalao

El consumo de pescado varias veces a la semana es una buena opción dentro de una dieta sana, variada y equilibrada. Nada impide que incluyas ese pescado en forma de croquetas de bacalao, perfectas para toda la familia. Sobre todo si las has hecho tú.

Seguro que vas a disfrutar con la textura tan suave y cremosa. El bacalao en trocitos se funde con la bechamel convirtiéndose en un bocado delicioso. Además, esta receta viene perfecta para usar restos de bacalao u otros cortes (o recortes) más económicos. Acompaña con unas patatas fritas paja que le quedan muy bien.

Ahora ya tienes todo lo que necesitas saber para hacer unas croquetas de bacalao al estido de elcroquetario.com. Dirígete a la cocina, ponte el delantal y… ¡A croquetear!

Ingredientes (12 croquetas)

  • 150 g. de bacalao desalado (peso sin piel y sin espinas)
  • 500 ml de leche entera
  • 30 g. de aceite de oliva virgen extra (2 cucharadas soperas aprox.)
  • 30 g. de mantequilla (o 30 g más de aceite de oliva)
  • 60 g. de harina de trigo de todo uso
  • 1 cebolla no muy grande
  • 1 pizca de nuez moscada
  • 1 pizca de pimienta negra molida
  • 1 o 2 huevos
  • Pan rallado
  • Aceite para freír
  • Sal

Elaboración de las croquetas de bacalao

  1. Quitamos las piel y las espinas al bacalao y lo cortamos en trozos pequeños. Reservamos.
  2. Comenzamos pelando la cebolla, la partimos por la mitad y picamos cada mitad lo más fino que podamos.
  3. Ponemos a calentar en una olla el aceite con la mantequilla. Cuando se derrita ponemos a sofreír la cebolla hasta que esté transparente.
  4. Espolvoreamos la harina, mezclamos bien y dejamos que se cocine por un par de minutos para quitarle el sabor a crudo.
  5. Incorporamos la leche a la olla y removemos enérgicamente con una varillas para evitar la formación de grumos. Seguimos calentando hasta que la mezcla espese y se empiece a despegar de las paredes.
  6. Echamos ahora el bacalao troceado y removemos bien para que se vaya desmigando a la vez que va cogiendo calor.
  7. Probamos y sazonamos con un poco de sal, pimienta negra molida y nuez moscada. Rectificar el sazón si fuera necesario.
  8. Transferimos la bechamel a una fuente y untamos la superficie con una capa fina de aceite para que no forme costra. Dejamos enfriar tapado en la nevera unas 4 horas o hasta el día siguiente.
  9. Sacamos la masa de la nevera y le damos forma de croqueta. Lo podemos hacer con las manos engrasadas o con un par de cucharas.
  10. Pasamos las croquetas por huevo batido y luego por el pan rallado. Prestamos atención a que las croquetas queden bien cubiertas para que no se escape la bechamel al freirlas.
  11. Ponemos a calentar abundante aceite. La cantidad necesaria para que cubra las croquetas. Este es el secreto para una fritura perfecta.
  12. Cuando esté bien caliente, pero sin llegar a humear, freímos las croquetas por tandas y las vamos dejando reposar en papel absorbente o una rejilla. ¡A comer!